TEGUCIGALPA.- El odio que les tenía a los malhechores fue el anzuelo que utilizaron varios individuos para sacar de su casa a un hombre, considerado exterminador de maleantes, y ultimarlo a balazos en la conflictiva colonia Nueva Capital.
La víctima fue identificada como Juan Ramón Rodríguez (42), apodado “El Olanchano”, originario del Manto, Olancho y residente en la colonia Nueva Capital, conocido ampliamente por no tener piedad con los delincuentes.
El Olanchano se hizo famoso en esa colonia desde hace unos dos años atrás, cuando repentinamente comenzó a tomar la justicia por su propia mano, luego que varios malvivientes supuestamente le mataran a un familiar.
En la Nueva Capital los ladrones, narcotraficantes, violadores y pandilleros de a poco comenzaron a ser ajusticiados a balazos y todas las personas sindicaban al justiciero como “El Olanchano”.
La madrugada de este domingo, aproximadamente a la 1:00, Rodríguez se encontraba en su morada, en lo alto de la colonia en mención, cuando de repente recibió una llamada anónima en la que le informaban que varios ladrones estaban atracando una vivienda.
Inmediatamente, el hombre se vistió, tomó su fusil carabina y su arma 9 milímetros y salió de su residencia con el propósito de ir en busca de los asaltantes y liquidarlos o por lo menos ahuyentarlos.
ERA QUERIDO EN LA ZONA
No obstante, en cuanto puso un pie afuera de su casa, fue atacado a balazos por los matones que ya lo estaban esperando, quienes posteriormente lo despojaron de sus armas y huyeron del lugar.
Algunos de sus parientes y los vecinos del lugar, escucharon las ráfagas de disparos y minutos más tarde se desplazaron al lugar y lo encontraron sin vida; su cuerpo presentaba al menos 20 impactos de bala.
Los lugareños, desconociendo las leyes penales, levantaron el cadáver de Rodríguez, lo llevaron hasta su vivienda y lo acostaron en la cama, luego llamaron a la Policía Nacional para reportar el hecho.
Los agentes de investigación asignados a Inspecciones Oculares, así como los empleados de Medicina Forense, hasta ayer por la mañana llegaron al lugar a realizar el levantamiento del cadáver.
Los restos mortales del hombre fueron llevados a la morgue judicial, donde hoy fue reclamado por sus seres queridos, quienes al querer ser abordados por los medios de comunicación, prefirieron omitir declaraciones.
Cabe señalar que en la morada de “El Olanchano” había unas 200 personas que lamentaban su fallecimiento, quienes indicaron que era bastante querido en el lugar porque había ahuyentado a la delincuencia.