El controversial decreto ministerial en el que se pone como norma la doble jornada en el sistema de educación básica, a partir de este año, se cumplirá a medias, según informaron este miércoles funcionarios de la Secretaría de Educación.
Después de los análisis realizados por las autoridades del ramo, concluyeron que hay establecimientos de enseñanza que cumplen con los requisitos para la nueva modalidad y otros que en una sola jornada las aulas son abarrotadas por los alumnos de educación básica no será necesario aplicarla.
El director de Evaluación de la Calidad Educativa, Denis Cáceres, manifestó que la implementación de las dobles jornadas será cumplida en aproximadamente 10,000 centros educativos en todo el país.
“Nosotros ya enviamos las notificaciones a las direcciones departamentales de cuáles son los centros educativos que este año deberán iniciar las clases con doble jornada”, expresó, Cáceres.
Añadió que las autoridades departamentales también hicieron llegar los oficios a los directores de los centros educativos básicos que es donde se implementará esa modalidad con el fin de mejorar los índices de aprendizaje de los niños y adolecentes.
“Tenemos un registro de 10,000 centros educativos de básica que ya están listos para la implementación de la doble jornada y en su mayoría estos centros están en las áreas rurales del país”.
Una de las valoraciones que hicieron las autoridades para escoger los centros que aplican para las dos jornadas, fue hacer un censo de cuáles solo imparten clases en la mañana y en la tarde las escuelas están desocupadas.
Para el cumplimiento de estas disposiciones que se ponen en vigencia en el presente año escolar, las autoridades educativas en diciembre del año pasado publicaron el decreto número 2664-SE-2013 sobre la implementación de una jornada doble.
Los primeros en contradecir el estamento jurídico publicado en el diario oficial La Gaceta, fue un sector de directores de centros educativos porque contrastaba con las debilidades del sistema educativo.
Asimismo, la dirigencia magisterial señaló que eso traería como consecuencia la inestabilidad laboral de los educadores y en consecuencia interpusieron recursos de amparo para que se derogara el decreto.
Los últimos en pronunciarse en contra de esa disposición ministerial fue la Junta de Transición de Educación del nuevo gobierno, encabezada por Marcial Solís, quien desautorizó al titular de Educación, Marlon Escoto, por tomar decisiones sin consultar.
El argumento de Escoto para agregar una jornada más es que los niños permanecerán en las escuelas mejorando su aprendizaje y aprovechando la merienda escolar principalmente en los sectores con mayores índices de pobreza. (ECA)