Los Valle, de cultivar café a poderosos narcotraficantes

La vida de magnates y la “Cuna de Oro” que hicieron para sus hijos los hermanos Valle Valle les duró un poco más de 20 años, porque la mayoría ya está tras las rejas y los otros son buscados por tierra, mar y aire mediante equipos especiales de inteligencia apoyados por Estados Unidos.

La familia Valle Valle atesoró millones de dólares, dándoles una “cuna de oro” a sus hijos.
La familia Valle Valle atesoró millones de dólares, dándoles una “cuna de oro” a sus hijos.

Honduras, en especial las zonas norte, atlántica y occidental, en los últimos años se volvieron un paso obligado para los carteles de Suramérica y eso convirtió al país en el puente para llegar a Estados Unidos por donde se desplazaba más del 90 por ciento del contrabando de cocaína.

Ello permitió que algunas familias que habitan en puntos estratégicos del país entraran al negocio prohibido, embelesados por el dinero, armas y poder que les permitía la actividad y la colusión de algunas autoridades.

Fue así que los municipios de Florida y El Porvenir en Copán se convirtieron en el punto perfecto, donde existían familias como los Valle Valle, interesadas en entrar al negocio prohibido, quienes en menos de diez años lograron amasar una incontable fortuna.

Después de ser terratenientes, pasaron a convertirse en una familia millonaria.
Después de ser terratenientes, pasaron a convertirse en una familia millonaria.

Inteligencia de la Policía Nacional logró establecer que la organización de narcotráfico se formó en 1990 cuando los hermanos Valle incursionaron en el cultivo del café, ya que anteriormente eran terratenientes de la zona, pero vivían como cualquier aldeano.

Gracias a que El Espíritu es una aldea remota de Florida, fueron estableciendo su dinastía y en 1991 las autoridades policiales iniciaron las investigaciones, porque presumían que se estaba creando en ese entonces un nuevo cartel en Copán.

Las autoridades tenían información que los Valle comenzaban a traficar con cocaína de la frontera de Nicaragua a lo largo de Honduras hasta llegar a Guatemala en camiones repartidores de productos, vehículos cargados de leña o en el interior del ganado.

HOMBRES DE CONFIANZA

Eran amantes de los caballos y pagaban más de medio millón por sementales de pura sangre.
Eran amantes de los caballos y pagaban más de medio millón por sementales de pura sangre.

En un inicio trabajaron con los carteles de Guatemala, ya que en ese país estaban los líderes de confianza para los mexicanos y colombianos, estableciendo de esa manera la denominada “ruta de la muerte”.

Esta comenzaba desde el sur de los departamentos de Gracias a Dios y Olancho, pasando por Colón, Cortés hasta llegar a Copán, es decir que los cargamentos llegaban en avionetas a La Mosquitia o pistas clandestinas de Olancho y desde allí era transportada vía terrestre hasta Guatemala, de donde se enviaba a México con destino final Estados Unidos.

Para 1996 Luis Alonso Valle Valle, subjefe del clan, fue detenido por las autoridades policiales con varios kilos de cocaína, sin embargo en ningún expediente de la DNIC de Copán se encuentra registrado el hecho.

Gracias a la libertad con que estaban trabajando, crecieron fuertemente y en 1998 Miguel Arnulfo Valle Valle fue identificado como el líder y cabecilla del clan de Copán y a pesar que desde la Secretaría de Seguridad hasta los jefes policiales lo sabían, nunca pudieron actuar.

Vivían rodeados de lujos en varias haciendas de Florida, Copán.
Vivían rodeados de lujos en varias haciendas de Florida, Copán.

El buen trabajo que realizaban en el trasiego de drogas, a cualquier precio, los llevó a ganarse la confianza de los carteles mexicanos, que dejaron de intermediar con los carteles guatemaltecos y llegaban directamente a Honduras donde desarrollaban reuniones solo de “toros pesados” (capos).

ALIANZAS DE CARTELES

A finales de los años 90, el clan de los Valle realizó una alianza estratégica con el cartel de El Paraíso, Copán, el cual era liderado por el exalcalde Alexander Ardón, ahora prófugo de la justicia y que se presume está en Brasil.

Los Valle y Ardón eran conocidos como “los señores” y mantenían el control de su territorio, al grado que a El Paraíso los desconocidos tenían que pedir permiso para entrar, ya que había vigilancia por todos lados.

Así fueron amasando su fortuna, construyendo enormes mansiones, haciendas, se transportaban en lujosas camionetas, helicópteros, lucían sus pistolas automáticas, además formaron pelotones de hombres fuertemente armados que los cuidaban en todo momento.

En el 2007 los hermanos Valle eran fanáticos de caballos de raza pura, valorados entre 20 y 30 mil dólares, cerca de medio millón de lempiras, además les gustaban los jaripeos, disfrutando de las ferias de Copán, donde se ofrecían como patrocinadores sin importarles los gastos.

El pueblo de Florida permaneció bajo el control de los Valle por muchos años.
El pueblo de Florida permaneció bajo el control de los Valle por muchos años.

Durante mucho tiempo, a consecuencia del poderío económico y de las influencias políticas de los hermanos Valle, a una de las integrantes del clan, identificada como Celeste Mía, se le conoció por realizar apuestas de corridas de caballos valoradas en más de 100 mil dólares, es decir más de dos millones de lempiras.

En el 2010 Miguel Arnulfo Valle Valle, conocido en el departamento de Copán como “El Colocho”, ya era dueño de más de dos mil cabezas de ganado lechero ubicadas en la hacienda Grande, también tenía más de 600 cabezas de bovinos en la hacienda conocida como La Meca.

Asimismo era propietario de otras 300 cabezas de ganado en la finca Los Tres Potrillos y manejaban más de dos mil 500 novillos en la finca El Semental, aduciendo su riqueza a la actividad ganadera, cafetalera y comercial.

LAS CAPTURAS

En el 2012 Luis Alonso Valle Valle, el segundo al mando del clan, fue capturado por un grupo de especialistas del Comando de Operaciones Especiales Cobras, quienes le dieron una tenaz persecución después de darse a la fuga en un operativo ubicado en el desvío de la salida a Santa Rosa de Copán.

Fueron dos patrullas de los Cobras que lo siguieron, ya que se transportaba en un vehículo pick up doble cabina, al final lo detuvieron en el baño de una clínica privada en Santa Rosa de Copán, donde intentó esconderse.

El arresto se realizó por tener orden de captura pendiente por violación especial porque padres de familia de La Entrada, Copán y de Copán Ruinas lo denunciaron por haber violado a sus hijas, una de 12 y otra de 13 años de edad.

Después de 6 días el juez de Santa Rosa de Copán le dictó un sobreseimiento definitivo. Según la denuncia Luis Alonso Valle Valle violó a la menor en unas bodegas de su propiedad junto a cinco trabajadores más.

Control en América Central

Gracias al trabajo de los cuerpos de seguridad del Estado, se frenó a uno de los grupos criminales más poderosos de la región.
Gracias al trabajo de los cuerpos de seguridad del Estado, se frenó a uno de los grupos criminales más poderosos de la región.

Después de una serie de investigaciones y al estar plenamente identificados por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), las autoridades hondureñas le cayeron a los hermanos Valle, incautándoles unas 52 propiedades en Copán y Cortés.

El 20 de agosto de este año el Departamento del Tesoro de Estados Unidos colocó a los Valle y a su líder Miguel Arnulfo, José Reynerio y Luis Alonso -en su «lista Kingpin» como narcotraficantes extranjeros.

El comunicado de prensa calificó a los Valle como «una de las organizaciones centroamericanas más prolíficas de narcotráfico y que movía más de 10 toneladas de cocaína destinada a Estados Unidos cada mes, usando una combinación de la violencia brutal y la corrupción pública”.

El 27 de septiembre estas autoridades intentaron arrestar a uno de los aliados clave del clan Valle, José Manuel López Morales, en Guatemala. López logró evadir la captura, pero se asegura que ellos son los jugadores principales del comercio de drogas de América Central.

Además se menciona que manejaban negocios con Ismael Zambada, conocido como “Mayo” Zambada, uno de los carteles más grandes y antiguos de Sinaloa con más de 40 años en ese negocio y perseguido por las autoridades mexicanas.