Miembros del Movimiento Estudiantil Universitario (MEU), han tomado como positiva la voluntad de las autoridades de retomar el diálogo en condiciones flexibles que permitan encontrar una salida a la prolongada crisis en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
La vocera del MEU, Mirta Gutiérrez, informó que después de las reuniones con los representantes de las diferentes carreras y facultades, determinaron que el próximo domingo sería el día propicio para regresar a las deliberaciones, a las 11:00 de la mañana, en el Palacio de los Deportes de Ciudad Universitaria.
Lo anterior también fue consensuado con las dirigencias de los demás centros regionales que se han mantenido en la misma lucha, en tanto los edificios de Ciudad Universitaria continúan tomados.
La portavoz aclaró que este primer concepto es un prediálogo para después presentar las propuestas de sus peticiones académicas que es construir nuevas Normas Académicas, sentar las bases para tener una representación estudiantil en los gobiernos universitarios y el mejoramiento de la calidad educativa, entre otros puntos.
“Nosotros como Movimiento Estudiantil Universitario estamos realmente contentos con la postura que tenía el movimiento y con lo consecuente en la lucha, porque no hemos flaqueado en nuestros objetivos”, señaló, al tiempo de reiterar que “miramos con buenos ojos la apertura que están dando las autoridades y hay las condiciones”.
De esta manera, indicó que los requerimientos fiscales, la represión ni la criminalización de la protesta les ha podido detener y ahora están viendo los frutos que esperaban durante más de un mes que han mantenido tomas de centros de manera consecutiva.
“Este ha sido un sacrificio en el que tenemos a 75 compañeros con procesos judiciales y creemos que este punto es innegociable, porque la libertad de ellos es lo primero”, consideró, para agregar que no era necesario haber llegado hasta estas instancias para llamar a un diálogo que buscara una mejor salida y respuestas a sus demandas.
Gutiérrez lamentó que, además de los requerimientos fiscales, han sufrido varios desalojos violentos, persecución estudiantil, levantamiento de perfiles, amenazas a muerte y compañeros que fueron esposados con aros de presión o “chachas”, como se pudo verlos en los tribunales.
La dirigente advirtió que mientras el proceso de diálogo no llegue a feliz término, continuarán con las asambleas informativas.
La joven no quiso adelantar que el lunes próximo estarían liberando los edificios, porque dependen de la respuesta que obtengan de las autoridades.
De momento no van a dar a conocer los nombres de los interlocutores que estarán en la mesa mediadora, al tiempo que las autoridades pueden traer a sus propios representantes. (ECA)
