Motagua lo logró, remó contra la corriente y en base a una pegada excepcional de su ataque se impuso 3-1 a un Olimpia que fue incapaz de mantener su ventaja y terminó cediendo ante la presión del rival.
Motagua lo logró, remó contra la corriente y en base a una pegada excepcional de su ataque se impuso 3-1 a un Olimpia que fue incapaz de mantener su ventaja y terminó cediendo ante la presión del rival.