Tras el asesinato de un docente y un alumno en distintos centros educativos del país, la dirigencia magisterial pidió ayer a los diputados del Congreso Nacional que se legisle para que haya seguridad en las escuelas y colegios.
Lo anterior fue manifestado por el presidente del Colegio Profesional Superación Magisterial de Honduras (Colprosumah), Roberto Tróchez, quien denunció que en el sistema educativo público hay más de mil maestros que trabajan bajo amenaza de muerte por parte de malvivientes.
Lamentó que hayan asesinado a balazos al profesor EricGualberto Banegas de la Escuela Ángel J. Hernández, en Esquipulas del Norte, Olancho, el hecho ocurrió mientras impartía clases. Asimismo, el niño Rodys Eduardo Peralta Rivera (12), de la Escuela Monseñor Jacobo Cáceres de la Aldea Suyapa de Tegucigalpa, quien murió de un disparo en la cabeza.
“Es lamentable que sigan asesinando a docentes dentro de los centros educativos y frente a los niños porque las secuelas del trauma no solo es para la familia del docente asesinado, sino para los niños que vieron cómo mataron a su profesor”, lamentó Tróchez.
Por tal razón, pidió que “es urgente que el Congreso Nacional legisle para que haya seguridad en los centros educativos y también se debe conectar con la sociedad para proteger a la población escolar que está siendo víctima de la criminalidad.
Ese tipo de hechos se ha venido repitiendo constantemente en los establecimientos de educación. Recordó el caso del profesor Mario Alberto Morazán, quien el año pasado fue asesinado en el interior del Instituto Técnico Honduras (ITH) de Tegucigalpa”.
“Tenemos una inseguridad terrible en más de 800 centros educativos que están focalizados en las áreas rurales y urbana donde se requiere una policía escolar”, señaló el docente para agregar que las autoridades de la Secretaría de Educación no quieren atender ese problema.
Tróchez indicó que son muchos los delincuentes que están dentro de los centros educativos reclutando niños “y después el gobierno los captura cuando lo mejor es prevenir que sean incorporados por estos grupos delictivos”.
Cuestionó que “el gobierno tiene abandonado el diálogo con el sector docente, abandonada la calidad educativa,el buen funcionamiento de la educación pública y abandonan a los niños que son el semillero del país”.
El dirigente magisterial reiteró que los diputados de las diferentes bancadas tienen la gran oportunidad de ayudar a la educación de los niños con una legislación que les garantice la seguridad, ya que “se dice que el único lugar donde están más seguros los niños y jóvenes es en las aulas de clases”.