Kevin Portillo, uno de 6,000 niños con cáncer en Honduras

A sus tres años de vida, a Kevin Portillo le diagnosticaron cáncer de retinoblastoma. Desde hace seis meses, la triste noticia llenó de dolor a los padres del niño, sin embargo, han contado con el poyo de la Fundación Hondureña para el Niño con Cáncer.

El tipo de cáncer infantil que padece Kevin afecta los tejidos de la retina del ojo, se forma en la capa de tejido nervioso posterior al ojo, que detecta la luz del exterior, y envía las señales al cerebro.

La enfermedad se puede desarollar tanto en los fetos, durante el tiempo de gestación, como en los niños en fase de crecimiento.

El pequeño es trasladado a la capital, cada 21 días, desde San Francisco, Lempira, para recibir sus radioterapias y todos los tratamientos que requiere su cuerpo para vencer el cáncer, los cuales son financiados por la Fundación y por los padrinos.

La Fundación realiza en febrero una serie de actividades para conmemorar el “Mes Contra el Cáncer Infantil”.

APOYO INCONDICIONAL

Su padre, el agricultor Porfirio Portillo (32), agradece la ayuda y el apoyo incondicional que la fundación les ha brindado en todo este tiempo.

“Todos nos ha ido saliendo bien, con la ayuda de Dios y la Fundación, que aquí nunca nos han negado nada, el apoyo ha sido incondicional, aquí se salvan muchas vidas”, aseguró Portillo.

“Sin la ayuda de esta Fundación y los padrinos, su hijo y otros niños no tuvieran la oportunidad de vencer la enfermedad”, agregó.

La Fundación Hondureña para el Niño con Cáncer enfrenta muchos desafíos para cumplir con la demanda de cobertura de tratamientos, ya que el número de niños afectados ha incrementado.

La dificultad no solo es por el número de pacientes, sino por la precaria situación de desabastecimiento de fármacos y material médico que enfrentan los centros hospitalarios del país.

Febrero fue declarado el “Mes de Lucha contra el Cáncer Infantil”, ya que la Fundación hace un llamado para que el gobierno y la población en general se solidaricen con esta noble causa.

La Fundación estará realizando una serie de actividades, entre estas, una megacolecta, el 16 de febrero, para obtener tres millones de lempiras para seguir brindando el apoyo a los pequeños y sus familias.

Cuando los padres buscan ayuda para sus hijos, estos llegan a los hospitales cuando ya tienen avanzada la enfermedad en un 44 por ciento.

¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS?

La presidenta de la Fundación, Nuvia Mendoza, dijo que “debemos educarnos y conocer sobre los síntomas de cáncer infantil, para detectar la enfermedad en una etapa inicial”.

Los médicos aseguran que cuando los padres llevan al hospital a los infantes, la mayoría ya tiene un 44 por ciento de avance de la enfermedad, lo que hace más difíciles y extensos los tratamientos.

Mendoza explicó que “debido a que los niños reciben los tratamientos cuando están en una etapa avanzada de la enfermedad, solo se logra un 60 por ciento de curación”.

En el año 2018, la Fundación Hondureña para el Niño con Cáncer atendió diferentes necesidades del 90 por ciento de los niños con cáncer, ya que sus familias son del interior del país y carecen de recursos económicos. (DS)

La Fundación ha detenido que destinar presupuesto para medicamentos y radioterapias, ya que los hospitales públicos no ofrecen el tratamiento.
JEFE DE ONCOLOGÍA DEL HEU
Cada año se atiende 370 nuevos casos
Alrededor de 370 nuevos casos de niños con cáncer son atendidos cada año en el Hospital Escuela Universitario (HEU), a los que se suman los pacientes que ya llevan un tratamiento, que son alrededor de 2,500 pequeños.

El jefe de oncología pediátrica del centro asistencial, Armando Peña, explicó que los padres deben pasar más pendientes de sus hijos, en su alimentación y los cambios en su cuerpo.

“Son diferentes las maneras en que se expresa esta enfermedad, y es un poco difícil de detectarlo en los niños; debemos orientar a los padres para que puedan detectar los síntomas de cáncer infantil”, detalló Peña.

Los principales síntomas son dolor de cabeza, vómitos por la mañana, abdomen que crece rápidamente, manchas blancas en el ojo, palidez facial y aparición de moretes con facilidad.

A esos signos se suman la debilidad y fatiga, dolor en las coyunturas y huesos, pérdida de peso, fiebre de origen desconocido, sangrados sin coagulación y ganglios inflamados en el cuello y las axilas.

El tratamiento anual para cada paciente está valorado en unos 150,000 lempiras y los niños deben recibir tres años de tratamiento.

DATOS
En Honduras, más de 6,000 mil niños sufren un tipo de cáncer, pero el sistema de salud tiene muchas dificultades para atender esta población, ya que en todo el país solo se cuenta con ocho médicos pediatras oncológicos. También se necesita implementar un banco de sangre y solventar otras necesidades, por lo que la Fundación construye un hospital donde los niños y familiares puedan recibir toda la atención necesaria.