Adolescente mata a su hermano de cinco años y come su pene durante ritual satánico

Una adolescente asesinó y mutiló el cuerpo sin vida de su hermano de cinco años el pasado jueves durante un rito satánico en Sao Paulo, Brasil.
Se trata de una joven de 18 años identificada como Karina, quien aceptó ante las autoridades brasileñas haber cometido el atroz crimen.
El cuerpo mutilado del menor fue encontrado por su madre, la noche del pasado jueves, en su casa, luego de haber salido de compras, dejando a su hijo al cuidado de su hija mayor.
Al llegar a la vivienda, indicó que no pudo abrir la puerta, por lo que le pidió a su hija quitará el seguro de la cerradura para ingresar, pero está se negó, lo que la hizo sospechar que algo no estaba bien.
Luego de varios minutos la atemorizada madre pidió ayuda a familiares para derrumbar la puerta del inmueble, y al ingresar se encontró con la terrible escena.
La mujer relató que junto a los restos del niño de cinco años estaba, su hermana, quien lo había rodeado con velas color negro.
Al verse descubierta, la adolescente trató de escapar del lugar, pero fue capturada por su tío que se encontraba ayudando a su madre para ingresar a la casa.
Los investigadores dijeron que el niño fue decapitado, tenía heridas en las muñecas, ojos y pies.
De acuerdo con la policía, la hermana confesó que había llevado con engaños a su hermano a su habitación para jugar, pero lo sometió y lo asfixió con una almohada.
Luego la joven aseguró que “cortó los órganos genitales a su hermano y se los había comido”.
Preliminarmente, las pruebas forenses realizadas al menor indicaron que el niño no había sufrido por la mutilación pues ya había muerto cuando ocurrió.
El reporte indica que en el lugar fue encontrado un celular quemado, un USB, una navaja y una pequeña cantidad de marihuana.
“Estamos investigando si el niño fue asesinado durante algún tipo de ritual satánico”, informó uno de los detectives del caso, Anderson Góes , según medios brasileños.
«Queremos saber si la acusada tenía vínculos en redes sociales con un grupo de satanistas o practicantes de magia negra y si alguien la alentó o incitó a cometer el crimen».
La adolescente se encuentra aislada en una prisión para mujeres de Sao Paulo, Brasil, acusada de homicidio.