Por: Jorge Roberto Maradiaga*
La Corte Suprema de Justicia de nuestra Honduras, es el máximo tribunal con jerarquía del Poder Judicial y es uno de los tres poderes de la República. Tal como es del conocimiento público, el próximo año (2023), ya contaremos con una nueva Corte Suprema de Justicia, cuyos integrantes son electos por el Congreso Nacional en el uso de las facultades o atribuciones que constitucionalmente le corresponden.
La Corte Suprema de Justicia está conformada por quince (15) magistrados, los cuales reiteramos son electos por el Congreso Nacional con el voto de dos terceras partes de la totalidad de sus miembros, de una nómina no menor de tres por cada uno de los magistrados a elegir, lo cual prima facie permita la escogencia de los mejores aspirantes a dicho cargo.
De conformidad al artículo 309 de la Constitución de la República, para ser magistrado o magistrada de la Corte Suprema de Justicia se requiere: 1. Ser hondureño por nacimiento; 2. Ciudadano en el goce y ejercicio de sus derechos; 3. Abogado notario debidamente colegiado; 4. Mayor de treinta y cinco (35) años; 5. Haber sido titular de un órgano jurisdiccional durante cinco (5) años, o ejercido la profesión durante diez (10) años.
Como se recordará, la potestad de impartir justicia emana del pueblo y se imparte gratuitamente en nombre del Estado, por magistrados y jueces independientes, únicamente sometidos a la Constitución y a las leyes. El Poder Judicial se integra por una Corte Suprema de Justicia, por las Cortes de Apelaciones, los Juzgados, y demás dependencias que señale la ley. Obviamente la Corte Suprema de Justicia, es el máximo tribunal con jerarquía del Poder Judicial y obviamente es uno de los tres poderes de nuestra República.
La Corte Suprema de Justicia tiene como función central o fundamental: 1. Organizar y dirigir la administración de justicia. 2. Conocer y resolver los recursos ordinarios y extraordinarios que se presenten contra las resoluciones de los tribunales de justicia de la República, de acuerdo con los procedimientos establecidos por la ley.
¿Y cuáles son las atribuciones de la Corte Suprema de Justicia? Pues según la Constitución de la República emitida en 1982, son las siguientes: 1. Aprobación de su reglamento interior; 2. Conocer de los delitos oficiales y comunes de los altos funcionarios de la República, cuando el Congreso Nacional los haya declarado con lugar a formación de causa; 3. Conocer en segunda instancia de los asuntos que las Cortes de Apelaciones hayan conocido en primera instancia; 4. Conferir el título de abogado (hoy notario) y autorizar a quienes lo hayan obtenido para el ejercicio del notario (actualmente las universidades otorgan el título de abogado y la Corte Suprema el de notario); 5. Declarar que ha o no ha lugar a formación de causa contra los funcionarios y empleados que la ley determine; 6. Conocer de las causas de extradición y de las demás que deban juzgarse conforme a la ley; 7. Conocer de los recursos de casación conforme a la ley.
Además: 8. Conocer de los recursos de amparo y revisión conforme a la ley; 9. Nombrar los magistrados, jueces, fiscales y demás funcionarios y empleados conforme a la ley; 10. Publicar la Gaceta Judicial; 11. Admitir o no la renuncia de los funcionarios o de su nombramiento y conceder licencia tanto a estos como a sus propios miembros; 12. Declarar la inconstitucionalidad de las leyes en la forma y en casos previstos en la Constitución; 13. Elaborar el proyecto del Presupuesto del Poder Judicial y remitirlo al Poder Ejecutivo para su inclusión en el Presupuesto General de Ingresos y Egresos; y 14. Las demás que le confieren la Constitución y las leyes.
Como puede apreciarse el cometido de la Corte Suprema de Justicia es de primera, razón por la que los integrantes de la misma, deben ser profesionales del Derecho de categoría y con prestigio a nivel nacional e internacional y con conducta y ejecutorias a toda prueba. En ninguna circunstancia debe ser objeto de politización, razón por la que todos los colegas aspirantes a Magistrados de la Corte Suprema de Justicia deben poner en evidencia su profesionalismo, ética y moralidad, pues de alcanzar el cargo de magistrado jamás debe ser la resultante de una politización.
Como profesional del Derecho: abogado y notario, doctor en Derecho Mercantil, máster en Asesoría Jurídica de Empresas y en Derecho Aeronáutico y Espacial, esperamos que todos los serios cuestionamientos que hasta ahora se han formulado en el proceso previa a la elección de los magistrados, sean totalmente superados y que se cumpla de principio a fin lo expresamente estipulado en nuestro vigente ordenamiento jurídico.
En consecuencia, esperamos que los colegas (hombres y mujeres) nombrados sean un verdadero orgullo y prestigio para Honduras, independientemente de su militancia política.
*Doctor en Derecho Mercantil, catedrático universitario y especialista en Derecho Aeronáutico y Espacial.
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