Reseña sobre “Balance previo”

Margarita Leoz (*)

Publicado por la editorial Efímera en 2022, Balance previo es el poemario más reciente del poeta hondureño José Antonio Funes (Puerto Cortés, 1963). El lector encontrará aquí una antología de las composiciones de sus tres primeros libros (Modo de ser, 1989; A quien corresponda, 1995; Agua del tiempo, 1999) y poemas nuevos aún no recogidos en ningún volumen anterior.

José Antonio Funes ha compaginado su labor de poeta con la de diplomático, viceministro de Cultura y profesor universitario, y es académico de número de la Academia Hondureña de la Lengua. Además, ha investigado extensamente —y continúa haciéndolo— la principal figura del modernismo hondureño, Froylán Turcios, a quien consagró su tesis doctoral defendida con honores en la Universidad de Salamanca en 2003.

En el oxímoron del título, Balance previo, subyace la propuesta del libro. Por un lado, el poemario es un balance de más de treinta años de escritura ―las tres primeras partes del libro―, un volver la vista atrás y contemplar los puntales de la vida literaria del poeta, en forma de aquellos poemas que fueron cimas y son ya clásicos de su escritura, como «No sólo por escribir escribo» o «Confesión de parte». Sin embargo, que el lector no se engañe: no se trata de un detenerse para mirar con nostalgia el pasado, como si ya estuviese todo dicho. No, el poeta hace un alto, se llena de aire y retoma el camino de la poesía en la cuarta y última parte del poemario, «Nuevos poemas».

José Antonio Funes practica una poesía que no es ajena a la existencia, la suya y la de sus semejantes. Sus versos más jóvenes no pueden despegarse de la violencia que asoló su país en la década de los ochenta («tanto amor huyendo de la bala perdida de la muerte, / tanta poesía atacada de polvo o de polilla»), pero constituyen también ya una declaración de intenciones, de aquellos ideales que conformarán al autor maduro. En una tierra solo «apta para cosechar espinas y alimentar rocas», el poeta ―como el albatros de Baudelaire, como el Quijote de su poema «Palabras a don Quijote»― se viste con la armadura de la escritura para hacer frente a la violencia acalladora («este silencio criminal que les aplasta la boca»).

Junto a la escritura como armadura, el poeta invoca al amor, único sometimiento legítimo, único yugo permitido («Y saber arrodillarse / únicamente para amar»). El amor se aloja en el interior («Adentro / es tu pecho abierto entre mis manos») mientras que en el exterior gobierna el miedo. El amor es intimidad, es presente, es linimento («el bálsamo que alivia todos los dolores del mundo»), pero no está libre de peligros; lo acechan la fugacidad, el paso del tiempo y la pérdida («como aferrarse a la vida al borde de un abismo»).

«A medianoche / los trenes se detienen a cargar recuerdos». A partir de la segunda parte de Balance previo, la voz poética se abre y evoluciona hacia otras latitudes no solo creativas sino también vitales. Sus poemas viajarán a París, a Bruselas, a Budapest, a La Habana («La Habana es una gran soledad / escondida en sus mil maquillajes») y reproducirán el malestar de la mirada nómada, la aflicción de la extranjeridad («Estás en una calle de Berlín / y de nada sirve que arrastres tus nostalgias»). En todo caso, las líneas esenciales de la poesía de José Antonio Funes se mantienen, tanto sus inquietudes temáticas como su estilo cristalino, sembrado de metáforas naturales que tienden hacia la luz («el beso que anuncie el sol / la amorosa llama / la gozosa llama que empiece a anunciar el día»). «Como mujer recién bañada en la tibieza de la cama», así penetra su poesía en el lector que se acerca a ella, igual de limpia, igual de desnuda, igual de natural y despojada, igual de bella.

Balance previo es, en sí mismo, un arqueo y una promesa. El recuento está hecho, tal y como se demuestra en los poemas antologados. Pero la promesa se ofrece en los nuevos, anuncio de las alegrías futuras, de aquellos otros versos que vendrán. El gozo que nos deparará su nuevo libro, que la editorial española Graviola publicará en otoño de 2023, ese ya lo estamos paladeando, ese ya lo tenemos en la punta de la lengua.

(*) MARGARITA LEOZ (Pamplona, España, 1980) Licenciada en Filología Francesa por la Universidad de Salamanca y en Teoría de la Literatura y Literatura Comparada por la Universidad de Barcelona. Autora del libro de poesía El telar de Penélope (Calambur, 2008), de los libros de relatos Segunda residencia (Tropo Editores, 2011) y Flores fuera de estación (Seix Barral, 2019) y de la novela Punta Albatros (Seix Barral, 2022). Sus artículos y sus críticas literarias han aparecido en revistas como Cuadernos Hispanoamericanos, Revista 5W, Litoral. En 2021 fue seleccionada para el proyecto «10 de 30» de la AECID (Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo), que elige a los diez mejores escritores españoles menores de cuarenta años para promover su obra en el extranjero.