Por: Francisco Zepeda Andino (Cnel. (R) FAH)
En reciente visita a la República Italiana, pudimos observar su pujante desarrollo agrícola reflejado en la verde campiña de Toscana y otras regiones. La industria mediana, pesada, turismo y más, han logrado ubicar a Italia como la 8ava.mejor economía del mundo, superior a Canadá, Brasil, Corea del Sur etc. Las instituciones republicanas democráticas cuyo origen se remonta a la antigüedad, se mantienen firmes a pesar de algunos altibajos históricos conocidos.
Parte de la fortaleza del sistema italiano es la independencia de poderes existente. El Ejecutivo a cargo de un Presidente, elegido por el Parlamento y el Presidente del Consejo de Ministros, actuando como Jefe de Gobierno. En la actualidad es la Sra. Giorgia Meloni. El Poder Legislativo se centra en el Parlamento y un Poder Judicial independiente.
SPQR, “Senatus PopulusQue Romanus”, “El Senado y el Pueblo romano”, expresión latina que resume la convicción democrática de una forma de gobierno, la cual estamos lejos de practicar. “Las dos entidades mencionadas, el Senado y el pueblo (populus), conformaban la soberanía del Estado romano. No obstante, solamente el “Pueblo romano” era considerado soberano por derecho propio mientras que el Senado, por si mismo, carecía de ese atributo”. “La idea de un pueblo libre y soberano estaba muy arraigada, pero atendiendo solo a no estar supeditados a un monarca”. “Los romanos consideraban que la monarquía era un estado inferior en la civilización y organización política…..”. Desafortunadamente, nuestro Poder Legislativo no responde ante quienes lo eligieron sino a intereses grupales o particulares y su accionar es acorde a lo anterior.
El temor de un grupo de Senadores sobre la posibilidad que Cayo Julio Cesar, con los poderes ya a mano, se proclamara Emperador o Rey, los llevó a tramar su asesinato el famoso Idus de Marzo (15 de Marzo), del año 44 A.C. En la actualidad la ciudad de Roma ha tomado las siglas SPQR como representación de esa urbe histórica.
Usando la ciudad de Siena como base, mediante el eficiente servicio de autobuses o trenes, nos desplazamos a Pisa, Florencia, Venecia y el centro turístico Cinqueterra. Solo la ciudad de Siena, con su enorme historia cultural, religiosa o política, nos podía haber consumido bastantes días. Ubicada en las colinas de Toscana, su irregular topografía presenta un reto para las piernas. Innumerables pendientes y bajadas, le dan un atractivo especial. La Universidad de Siena, fundada en 1240 es una de las más antiguas de Italia. La Catedral de Siena y su torre datan del siglo Xll y se concluyó de construir en 1380. Especial mención merece la Piazza del Campo, en el centro histórico, y anualmente en dos fechas diferentes se corre el famoso Palio di Siena, donde las diferentes “Contradas” de la ciudad, compiten con su caballo. Las “Contradas” con origen medieval, son asociaciones de zonas o localidades, donde vivían carpinteros, pintores, médicos, escultores, etc., teniendo como rival o aliado un vecino y su principal objetivo era darse seguridad y defender a los habitantes de su área.
Las “Contradas”, actuales son Águila, donde residían notarios; Oruga, comerciantes de seda; Caracol, Lechuza, Dragón, Jirafa, Puercoespin, Unicornio, Loba, Concha, Ganso, Ola, Pantera, Selva, Tortuga, Torre y Valle del Carnero. Cada una tiene sus colores y figura representativos. El 2 de Julio estuvimos allí para ver la gran celebración de los seguidores de Selva, ganadora del evento. Se distingue la carrera por el hecho que los jinetes montan sin silla alguna, lo llamado “a pelo”, por tanto las caídas son frecuentes y el caballo que primero cruza la meta, con o sin jinete, es el ganador. Precisamente, el Palio del 20 de Octubre, 2018, fue ganado por Tortuga, caballo sin jinete (Puede verse en Youtube). El día del Palio, antes del evento principal, las Contradas recorren calles aledañas al centro con tambores, banderas y vestimenta propia medieval. Sin duda alguna, un ambiente festivo que vale la pena estar presentes.
Junto al Coliseo romano y la Torre Eiffel en Paris, la Torre Inclinada de Pisa es una de las estructuras fácilmente reconocidas alrededor del mundo, por lo cual no podía faltar en nuestro periplo italiano. De mármol blanco, se terminó de construir en 1372 y se ubica a un costado de la Catedral de Pisa con una altura de 56 metros. Continuará.