Izquierda neocolonialista y neofascista retrógrada

Por: Ángela Marieta Sosa*

La postura política contemporánea de la izquierda comunista se basa en mitos que sirven de pretexto para una conducta fascista, denominada aquí “neofascismo”. Conceptualizar el mito, y un breve análisis de la teoría del valor-trabajo de Marx, permiten entender que muchos postulados del comunismo carecen de naturaleza científica. A partir de elementos definitorios del fascismo se discuten similitudes con categorías discursivas del comunismo: actitud ante la globalización y atrincheramiento nacional de la retórica de “izquierda”; reivindicación de valores tradicionales para posturas moralistas ante la “perversión” del capitalismo; antimodernismo como justificación de propuestas atrasadas y primitivas; carácter no científico; naturaleza totalitaria; y un carácter mesiánico. Se concluye que el comunismo es hoy un ropaje del neofascismo. Doctor Humberto García Larralde, economista, doctor en estudios del desarrollo, coordinador del área de desarrollo económico del Centro de Estudios del Desarrollo, Cendes, de la Universidad Central de [email protected]

En los últimos discursos de la titular del Ejecutivo en Honduras, escuchamos una retórica trillada, basada en odio y resentimiento social, argumentando el deber imperante de salir del sistema capitalista, sin embargo, lo que no dicen es que están llevando al país al neocolonialismo socialista y retrogrado, que solo produce pobreza extrema, éxodos migratorios e inseguridad humana, y para prueba basta escuchar las entrevistas que a diario se le hacen a migrantes venezolanos que transitan por Honduras para llegar a Estados Unidos de América como destino final.

Imponen la garra intervencionista estatista que progresivamente va restringiendo libertades fundamentales y la propiedad privada, se alimentan del caos para desestabilizar la institucionalidad generando escenarios inseguros jurídicamente para ahuyentar la inversión extranjera y justificar la necesidad (que solo en sus mentes existe) de implementar un nuevo orden a la medida de sus intereses y destruir la democracia y el Estado de derecho que aún nos queda.

Los referidos discursos a nivel nacional e internacional encajan perfectamente en aquella conocida frase de “candil de la calle y oscuridad de la casa”, puesto que mientras la Presidente anda sumergida en la marea roja internacional prometiendo un cambio radical del sistema para extinguir la democracia en Honduras y demostrando “según ella” la implementación atropellada de la agenda internacional de la izquierda radical, para congraciarse con sus padrinos políticos, en Honduras la realidad es otra, y está desconectada totalmente de esa narrativa obsoleta que arguyen los actuales gobernantes del Partido Libre, denotando una falta de conocimiento y de identidad nacional nunca vista, ya que al parecer no ven, no perciben, no reconocen nuestra realidad socioeconómica, nuestra idiosincrasia, costumbres, creencias religiosas y cultura política.

Solo para referencia de la oscuridad que en casa vivimos, compruebe usted estos datos, para el cierre del año 2022, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) en Honduras se perdieron más de 60,000 empleos en el sector privado, y unos 35,000 en el sector público, debido a falta de condiciones favorables y de seguridad jurídica de las empresas ya existentes y aquellas que podrían invertir desde el extranjero.

El nivel de sesgo político maligno e irracional, es tan radical, que recién llegan a Cuba la gobernante y parte de su familia y les parece deslumbrante “un modelo económico y de desarrollo social exitoso”, recibiendo en redes sociales reveses de internautas que con fotografías les demuestran todo lo contrario al encanto que ellos expresan, dejando la mayoría de usuarios mensajes de molestia y de ofensa a la inteligencia de un pueblo que no les cree y que al parecer se ve impotente de poder detenerlos, aprovechando espacios de manifestación para tan solo reflejar lo mal que estamos los hondureños.

Según nuestra experiencia con el desgobierno socialista antidemocrático de libre, lo planteado por el doctor García Larralde en el primer párrafo de este artículo, coincide con el accionar del actual gobierno, puesto que hasta hace poco el Partido Nacional de Honduras denunció públicamente que Castro crea una ‘trama fascista’ para presentar casos ficticios contra opositores a sus acciones, afirmando que Xiomara Castro y su esposo, el expresidente Manuel Zelaya Rosales, utilizan la Dirección Nacional de Investigación e Inteligencia (DNII) con el propósito de llevar a cabo una persecución política contra líderes de la oposición en el Congreso Nacional.

*Magíster en derechos humanos.

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