Por: Adán Hilario Suazo Molina*
Kufiya es una bufanda o pañuelo utilizado por el pueblo palestino tradicionalmente, para protección de las inclemencias del ambiente, constituido como un símbolo de identidad y orgullo para los miembros de la nación Palestina y popularizada por quienes simpatizan y apoyan esa causa.
El conflicto Árabe Judío, se originó desde la misma declaratoria de independencia y proceso de reconocimiento de Israel como Estado, que data, de mayo 1948. Desde entonces las constantes agresiones de los países opuestos a su existencia, llegó a provocar la escalada de cuatro grandes guerras, incluyendo el conflicto actual en Gaza, prolongado por más de seis meses, sin la certeza de un alto al fuego, entre dos contendientes irreconciliables.
Para comprender esta complicada situación, es necesario tener presente, que Hamás (grupo que gobierna Gaza), es considerado, una organización política, paramilitar palestina, sunita, autodefinida como nacionalista, islamista y yihadista, calificado como grupo terrorista, por: la Unión Europea, Estados Unidos, Japón, Israel, Canadá, Australia, Secretaría de la OEA, Paraguay, Costa Rica y Reino Unido; cuyo objetivo original es: establecer un Estado Islámico en la región histórica de Palestina, que comprende, el actual Israel, Cisjordania y la Franja de Gaza, con su capital en Jerusalén.
¿Qué ha desencadenado la actual escalada? …El 07 de octubre 2023 se produjo una incursión a Israel, por una fuerza perteneciente a Hamás, penetraron la frontera con la Franja de Gaza, el premeditado ataque produjo unas 1.200 víctimas, quienes fueron asesinadas, mutiladas, quemadas, violadas y profanadas por terroristas de Hamás; 240 israelíes más fueron tomadas como rehenes.
Seis meses después y como producto de una lógica contraofensiva israelí; Hamás ha proporcionado la cifra de 32.000 muertos y 85% de los 2.3 millones de habitantes de Gaza han debido huir; como en todo conflicto hay datos difíciles de comprobar.
Se debe comprender, aunque sea difícil aceptar, que estamos ante enemigos irreconciliables, en donde es complicado establecer treguas y mucho más pactar un alto al fuego.
Desde nuestra perspectiva, podemos considerar algunas particularidades: Honduras cuenta con unos 200 mil habitantes de origen Palestino, segmento muy influyente en nuestro país, pero, al final se trata de ciudadanos hondureños regidos por nuestras leyes y mandatos.
Analizando a grandes rasgos la situación y observando sin apasionamientos el panorama de estas naciones en conflicto, podemos plantearnos lo siguiente: ¿merece la pena exhibir públicamente símbolos de simpatía hacia Palestina?, como la bandera Palestina, desplegada en el Congreso Nacional, debemos ser congruentes con nuestra política de relaciones internacionales mostrando respeto hacia los países con quienes mantenemos dichas relaciones; los intereses nacionales, deben ser la guía, mientras que, la afinidad política y la amistad son el complemento, ¿Quién nos ha tendido la mano cuando lo hemos necesitado? o ¿a quién podemos acudir en caso de necesitar? ¡No! cometamos el error ya cometido con el caso Taiwán. Honduras e Israel han mantenido relaciones diplomáticas, desde enero de 1950.
Un hecho poco conocido, pero del cual podemos enorgullecernos, es la operación de repatriación de sobrevivientes del holocausto judío, utilizando como medio la embarcación Exudes 1947 bandera hondureña, nuestro símbolo patrio garantizó, que la nave no fuese interceptada y devuelta al puerto de partida, en agosto de 2023 se recordó el 76 aniversario de esta operación, el vicecanciller Tony García asistió al acto conmemorativo en representación de nuestro país. Estos son hechos notables que no podemos obviar y que debe ser parte obligatoria en nuestra curricula educativa. Hechos que ratifican nuestra amistad con Israel… pero que absolutamente no demerita nuestro respeto hacia el pueblo palestino.
Hace algún tiempo, conversando con el ciudadano benefactor de la humanidad, “Tony el Suizo”, le escuche un impresionante razonamiento, una pregunta a Tony: tienes acaso pensado el puente más importante que construirás algún día, respondido sin titubeos: “mi gran sueño es construir un puente entre Israel y Palestina, que simbolice la unión entre estos dos pueblos y que se logre en una paz permanente” … si recuerdan, Tony había llegado al país para donar puentes de emergencia cuando el Mitch, algo que aún realiza alrededor del mundo.
El 10 de mayo del presente año, la ONU sometió a votación el otorgamiento de nuevos derechos y privilegios para Palestina, la votación fue contundente. 143 votos a favor, 9 en contra y 25 abstenciones, la asamblea, pidió al Consejo de Seguridad reconsiderar sobre la solicitud de que Palestina se convierta en el 194 miembro de la ONU. La simpatía por los palestinos crece, sin duda; más la petición para Palestina, como la plantea Hamás, es un imposible.
volviendo a las demostraciones relacionadas con el uso de la Kufiya y otros símbolos palestinos, por funcionarios gubernamentales y prominentes políticos hondureños, entendamos, que sus expresiones, son de carácter particular, dirigidas al pueblo palestino y no para Hamás, demostraciones para expresarse en espacios públicos, y no en edificios del Estado.
El puente simbólico entre Israel y Palestina, es ante los hechos y circunstancias actuales imposible.
Pero… Con toda seguridad el paso inapelable para Palestina es: constituir su propio gobierno, totalmente fuera de la órbita de Hamás.
*Coronel de Aviación ®