En una rápida acción policial, dos asaltantes fueron capturados este miércoles tras provocar terror en el interior de un bus rapidito donde hirieron con machete al motorista, en el bulevar Fuerzas Armadas, frente al plantel de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte en Tegucigalpa.
El conductor de la unidad interurbana que cubre el trayecto Tegucigalpa-Danlí-El Paraíso, Pedro Fernández, fue trasladado de emergencia al Hospital Escuela Universitario (HEU) luego de sufrir una herida en el rostro.
Según testigos, el asalto aconteció hoy a las 8:30 de la mañana, cuando el autobús de servicio ejecutivo se desplazaba hacia la terminal procedente de la zona oriental del país.
Los ladrones ingresaron a la unidad, haciéndose pasar como pasajeros y viajaron casi todo el trayecto desde Danlí, El Paraíso a Tegucigalpa.
Sin embargo, los delincuentes se levantaron de sus asientos en ese sector capitalino y tras sacar sendos machetes que escondían entre sus pantalones comenzaron a gritar que se trataba de un asalto, exigiendo a todos los usuarios que entregaran las pertenencias.
Aparentemente, el motorista trató de oponerse al asalto, pero uno de los malvivientes le infirió un machetazo, cortándole parte del rostro y el labio.
Debido al “filazo” en su cara el conductor perdió el control de la unidad, hasta impactar contra otro vehículo que circulaba por el lugar.
En una acción aplaudida por los transeúntes y pasajeros, varios elementos de Vialidad y Transporte, anteriormente Tránsito, emprendieron la persecución de los delincuentes que trataban de escapar blandeando sus machetes.
La huida, como sacada de escenas de película, desató la histeria colectiva de los pasajeros, entre estos varios niños, así como personas que circulaban a través de esa zona comercial.
No obstante, los antisociales fueron sometidos a la impotencia y luego trasladados hasta una posta policial, acusados de asalto y tentativa de homicidio.
Mientras, Pedro Fernández fue trasladado de emergencia hacia el Hospital Escuela Universitario (HEU), donde se recupera satisfactoriamente, pese a la profunda herida recibida en su rostro.