Romney afianza apoyo entre republicanos antes de nuevas citas electorales

WASHINGTON, EE.UU.- Tras dos victorias consecutivas, Mitt Romney afianza su apoyo entre los republicanos ante las cuatro citas electorales de esta semana que comienzan hoy con los «caucus» en Minesota y Colorado.

Mitt Romney, ex gobernador de Massachusetts, pretende apuntalar su candidatura presidencial con nuevas victorias en tres estados donde se vota hoy, Colorado, Minnesota y Missouri.

Romney, que el sábado pasado ganó en los «caucus» (asambleas populares) en Nevada y, cuatro días antes, en las primarias de Florida, llega a Minesota y Colorado y a la primaria no vinculante en Misuri, también este martes, como claro favorito para alzarse con la candidatura presidencial del Partido Republicano.

El estado de Maine inició sus «caucus» el sábado pasado y los concluirá el próximo sábado. Romney tiene una amplia ventaja de organización y fondos en cada uno de esos estados, en comparación con los otros candidatos en liza.

En su afán por lograr la candidatura, Romney ha puesto a la defensiva a Newt Gingrich, su más próximo rival, quien busca revitalizar su estrategia en los estados del sur de Estados Unidos, de corriente más conservadora.

Ambos tienen la mira puesta en el «súper martes» del 6 de marzo, donde una decena de estados celebrará primarias o «caucus» y, en total, entrarán en juego más de 400 delegados para la convención nacional republicana en agosto próximo que designará oficialmente al candidato.

Se requiere el apoyo de un mínimo de 1.144 delegados para conseguir la candidatura presidencial republicana.

El impulso de Romney en Florida y Nevada es prueba, según los observadores, de que los votantes conservadores -incluyendo los del movimiento «Tea Party»- han empezado a cerrar filas en torno a su candidatura, pese a sus recelos sobre su pureza ideológica.

Precisamente para demostrar su conservadurismo, Romney continúa sus ataques contra Obama, a quien quiere vencer, si logra la candidatura, en los comicios del 6 de noviembre.

Hoy mismo, Romney lanzó a través de Twitter una campaña en contra de una norma de la Administración Obama, anunciada el pasado 20 de enero, que obliga a los empleadores, incluida la Iglesia católica, a incluir la cobertura de anticonceptivos en los planes médicos que ofrezcan a sus empleados. El precandidato considera esa norma un
«ataque a la libertad religiosa» en EE.UU.

Según Romney, Obama busca «imponer una visión secular a los estadounidenses» quienes, a su juicio, se oponen a que se les prive de su libertad religiosa.
La campaña de reelección de Obama, que ha convertido cada error de Romney en un arma electoral, replicó de inmediato que éste tuvo políticas «idénticas» cuando fue gobernador de Massachusetts.

Los republicanos hasta ahora han celebrado cinco caucus y primarias. La primera, el 3 de enero, la ganó el ex senador Rick Santorum, la segunda en New Hampshire fue ganada por Romney, la tercera en Carolina del Sur fue para el ex presidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich, mientras que las dos últimas, en Florida y Nevada los votantes republicanos le dieron la victoria y los delegados a Romney.

Pero a pesar de las dos amplias victorias de Romney en la última semana, sus tres oponentes prometen seguir en la carrera con la ilusión de recuperar terreno, a pesar de la inferioridad de recursos económicos para enfrentar el poderío de la campaña del ex embajador de Massachusetts. EFE