Dos de los cuatro pandilleros capturados en la colonia Cerro Grande, porque pretendían quemar más camiones, actualmente son investigados en relación a varias masacres ejecutadas en la capital y el “encostalamiento” de cadáveres.
Un equipo de respuesta de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) capturó, el miércoles pasado, a Edgar Misael Campos Romero, conocido como «Cabra»; Javier Misael Velásquez Bueso, alias «Kasper»; Jairo Alexander Núñez Amador, alias «Little Monkey» y a Mario Alfredo Juárez Gómez, apodado «Chaca», cuando planeaban atentar contra un carro repartidor de productos en esa zona de Comayagüela.
Este jueves se estableció que en contra de “Chaca” y “Little Monkey” ya había órdenes de captura pendientes por los delitos de asociación ilícita, portación ilegal de armas y tráfico de drogas, además de estar plenamente identificados por testigos de haber participado en algunas masacres ejecutadas a principios de año en el sur de la capital, entre ellas dos ejecutadas en la colonia La Rosa, en Comayagüela.
Además de ser considerados “quemacamiones” y “gatilleros” de la pandilla 18, los imputados son de igual modo investigados por los delitos de tortura, extorsión, terrorismo, muerte y encostalamiento de cadáveres.
Los cuatro sujetos fueron capturados en una casa de alquiler de la colonia Cerro Grande, donde tenían escondidos tres galones conteniendo gasolina, más de 20 libras de marihuana y teléfonos celulares de diferentes marcas y modelos. Pero lo más macabro fue el hallazgo de un dispositivo habilitado en el patio con acción mecánica de torniquete para torturar personas o rivales, se indicó. De igual modo, indicaron que en el patio de la vivienda los uniformados hallaron ocho costales rojos en que meterían cuerpos de personas.
Actualmente, los imputados están detenidos por asociación ilícita, almacenamiento y posesión para el tráfico de drogas, por mientras se les comprueban los otros delitos, entre ellos el homicidio masivo de personas.
Detenidos en Cerro Grande son envueltos en masacres
