Hasta en 50% se reducen extorsiones

Después de la reforma al Código Penal, con el que se fortaleció a la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA), se ha logrado reducir hasta en un 50 por ciento los casos en la capital, pues lo que más sufrían eran las “pulperías” y los pequeños trabajadores.

Con la línea antiextorsión (143), ahora todo es más fácil para las personas afectadas, pues con una llamada se ponen en movimiento los equipos de la FNA y se les da captura a las personas que se dedican a “vivir” del trabajo de los demás.

De enero a la fecha, se han recibido unas 200 llamadas a la línea 143, por denuncias de extorsión, según estadísticas de la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA).

Estos llamados de auxilio se incrementaron luego que seis leyes fueran reformadas en el Congreso Nacional, con lo que se le dio más fuerza a la FNA, dedica en exclusiva a resolverles los problemas a las personas que son extorsionadas por bandas criminales.

Un agente de la FNA que recibe llamadas de auxilio a la línea 143, relató que en uno de los casos, la víctima se comunicó con ellos, porque recibió un mensaje en su teléfono, que tenía que pagar 10,000 lempiras. Si no lo hacía, matarían a sus dos hijos.

Las organizaciones criminales ahora envían jovencitos a recoger las extorsiones.

Fue así que, la angustiada y atemorizada mujer, dijo que no sabía cómo proteger a sus vástagos, por lo que decidió marcar el 143.

“La crisis era tan fuerte, que la llamada se trasladó con la psicóloga para que la pudiera controlar, tenía que ir a entregarlos a una colonia al oriente de la capital, en el tiempo establecido”, comentó el operador.

La señora, muy asustada, no lograba coordinar oración, por lo que la FNA pasó la llamada al psicólogo de la oficina y después que la logró estabilizar emocionalmente, fue atendida nuevamente por un operador y se le asignó un código para ingresarla en condición de testigo protegido. Después que formalizó la denuncia, el caso fue trasladado a un investigador.

“Un equipo de trabajo realizó varios días el seguimiento del caso, al lugar llegaron los sospechosos en motocicleta, se capturaron; en la sentencia se verificó que uno de los que andaba había sido compañero de trabajo de la víctima”, detalló el agente.

DENUNCIAS ANÓNIMAS

Desde que se fundó la FNA, se han recibido más de 60,000 llamadas que han contribuido a frenar el delito de extorsión.

Este tipo de casos recibe cada día la Fuerza Nacional Antiextorsión en el sistema de denuncias anónimas, a la línea 143, servicio creado con la necesidad de fortalecer la comunicación entre la ciudadanía y los agentes de seguridad, a través del seguimiento y evaluación de las llamadas.

Entre las denuncias más frecuentes destaca la de extorsión a pulperías, vendedores de frutas y verduras, tortilleras, vendedoras de baleadas, en la que se exige al dueño pagar cierta cantidad de dinero en efectivo para poder continuar con la atención a sus clientes.

“De una colonia de Comayagüela recibimos una llamada, que tres miembros de la pandilla 18 pasaban recolectando el dinero, ya tenían días específicos en varias pulperías de esa zona”, refirió el agente.

La reforma al artículo 222 del Código Penal establece que un individuo incurriría en el delito de extorsión con el simple hecho de exigirle dinero bajo amenaza a una persona.

Detalló que mientras se realizaba el proceso de investigación recibieron más denuncias de dueños de pulperías que continuaban exigiéndoles dinero.

Después del operativo de seguimiento, los agentes se trasladaron a la colonia el día que los extorsionadores tenían para recoger la fuerte suma de dinero.

“Siempre van tres, uno o dos recolectan y otros andan como resguardando, y como a unas seis cuadras de uno de los negocios, que recogieron el dinero, fueron capturados y se remitieron a los juzgados por el delito de extorsión”, explicó el agente.

Recordó que en este caso se logró una sentencia condenatoria de varios años, porque después testificaron cinco personas más por el mismo delito.

Según las estadísticas de la FNA, durante los primeros meses de este año se han recibido 177 llamadas.

ANTES DE REFORMAS

Uno de los obstáculos que la FNA tenía con la anterior ley del Código Penal, era que para lograr la captura del supuesto extorsionador se exponía la vida de los agentes y de los testigos protegidos al momento de la sentencia, y además debía consumarse el delito para tipificarlo.

Igualmente, se prolongaba el tiempo de las capturas, ya que los pandilleros cambiaban el lugar y había contacto con la víctima, quien abandonaba los procesos judiciales por miedo a volver a ser objeto de extorsión, lo que era aprovechado por el delincuente para salir en libertad.

Para luchar con más fuerza contra la extorsión, varias leyes sufrieron reformas en el Congreso Nacional, entre ellas el Código Penal, Código Procesal Penal, Ley de Limitación de Servicios de Telecomunicaciones en Granjas Penales, Ley de Inteligencia Nacional, Ley Especial Sobre Intervenciones de las Comunicaciones Privadas y Ley del Instituto Nacional Penitenciario, que sirven para frenar el surgimiento de bandas extorsivas y neutralizar las existentes.

Uno de los obstáculos que la FNA tenía con la anterior ley del Código Penal, era lograr la captura del supuesto extorsionador.

La reforma al artículo 222 del Código Penal establece que un individuo incurriría en el delito de extorsión con el simple hecho de exigirle dinero bajo amenaza a una persona.

Asimismo, la iniciativa agregó dos párrafos al artículo 335 del Código Penal, con el propósito de calificar de terrorismo los actos que infundan temor en la población.

ROMPER EL SILENCIO

Como en todos los casos delictivos, la denuncia es una “arma primordial” de toda unidad de seguridad, por tal razón, las víctimas deben comenzar por “romper el silencio” y buscar ayuda, porque pagar la cantidad exigida es abrirles las puertas a las bandas delictivas.

El transporte público ha sido duramente golpeado por los mareros extorsionadores.

La FNA recalca que el delito de extorsión está debidamente documentado, es por eso que se hace un seguimiento al momento de recibir una llamada, para iniciar el proceso de investigación y seguimiento.

A fin de facilitar a las personas un número que las víctimas puedan recodar rápidamente, se estableció que se asociara a únicamente tres dígitos: 143, por considerar que la persona está pasando la angustia que provoca una llamada extorsiva.

La FNA recuerda que cada caso es manejado bajo el anonimato, con el objetivo de garantizar la seguridad de las víctimas, y dar la confianza, que las personas no tengan temor a formalizar la denuncia.

DATOS

Las llamadas a la línea 143 son calificadas como de carácter prioritario, por los motivos de denuncia o alertar un hecho extorsivo. Desde que se fundó la FNA, se han recibido más de 60 mil llamadas que han contribuido a frenar el delito de extorsión, lográndose la captura de muchas personas por varios delitos.