‘La China’ Sicaria se declara amante de la marihuana (Galería)

La imagen de Ana Channely Córdova Bonilla, de 20 años, se asocia más a una aspirante a modelo que a una fría sicaria que mata sin remordimiento.

Córdova Bonilla, conocida como la “Rubia Matona” y “La China” o como se autodenomina en sus cuentas de Facebook “La Perry´s Xinita”, fue arrestada el pasado miércoles por la tarde.

Ella fue identificada como la mujer que aparece en un video de seguridad matando a sangre fría al conductor José Manuel Gómez Vindel, en un autobús de la empresa de transportes Cristina.

El crimen quedó registrado en el video captado por las cámaras que están en la estación, situada en la ciudad de La Ceiba, Honduras, y en el interior del autobús.

La supuesta sicaria tenía dos cuentas de Facebook con el alias “Chanell Giimenez”, en las que se encuentran muchas fotografías en poses sensuales y con ropa muy provocativa.

En esas cuentas se registra el cambio experimentado por Córdova Bonilla, de una chica con deseos de modelar a una temida asesina.

En su primera cuenta, en la que también se identifica como La Perry´s Xinita, se registra en su biografía como una “modelo profesional independiente”.

Asimismo señala que estudió en una universidad privada de San Pedro Sula.

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Córdova Bonilla dejó de publicar en esa cuenta en julio del 2015.

Sin embargo, siguió muy activa en su otro perfil, donde se denomina como la “Comandante jefa de jefes”,

En esta cuenta se puede ver los diferentes cambios de imagen de Channely, quien aparece con el cabello negro, castaño y rubio.

En una de sus publicaciones reveló que la marihuana “es una planta muy bella”, pero que ya no la fuma.

En la última publicación registrada el 15 de marzo, se observa una foto en la que aparece con su madre.

En uno de los comentarios escribió: Mamita te amo… Siempre te llevaré en mi mente y en mi corazón.

Al momento de su detención, Channely lucía muy arreglada, con una calzoneta, una camisa transparente, maquillada y el cabello bien arreglado, quien no paraba de sonreír, mientras era custodiada por los agentes policiales.

 

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